2010




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La Orotava, 10 de junio de 2010.
2009 ha sido el año en que llovió, algo que no ocurría desde 1942, según escuché. Una llovizna suave, una sorimba que arruinó los diseños de muchas alfombras. Muchos alfombristas siguieron trabajando toda la mañana como pudieron bajo la lluvia, refugiados en sombrillas, protegiendo los materiales más delicados, empapados. Los pétalos de flores no se estropearon, es más los colores estaban más saturados que nunca, pero sí los materiales en polvo, como el brezo o el brezo tostado. Las arenas del tapiz de la Plaza del Ayuntamiento se desdibujaron un poco pero aguantaron.

Hacia las 2 de la tarde dejó casi de llover y los alfombristas que habían visto perderse por imposibles sus diseños los rehicieron con motivos más simples, decorativos, basados en flores, improvisando. De verdad, ¡gracias por no rendirse! Cuando me tuve que ir de La Orotava alguna alfombra estaba empezando.

Hacer fotos bajo la llovizna no es sencillo, y yo ese día iba con ropa de verano, gracias a un viejo jersey que siempre llevo en el maletero. Meterse bajo un portal, secar cuidadosamente la lente de gotitas, proteger la cámara con la mano y tirar dos o tres fotos (o una) hasta que las gotas caían de nuevo en el objetivo.
Como otros años, me parece mucho más interesante el espíritu que se vive en La Orotava esa mañana que las alfombras terminadas.


- Alfombristas de La Orotava

Otras visiones:
Galería de Germán Lorenzo Fariña
Galería de Luis Avero
Galería de Snapjacs



Tapiz de la Plaza del Ayuntamiento
Equipo dirigido por Domingo González Expósito.

"Con motivo de la celebración del Año Sacerdotal por parte de la Iglesia Católica, el tapiz central del Ayuntamiento de La Orotava tiene este año como motivo principal la Última Cena, mientras que los laterales recogen otros dos momentos clave: el lavatorio de los pies, en el lado izquierdo, y la imposición de las manos, en el derecho.

"El motivo del tapiz central es la última cena de Dalí, con una composición de tres cuadros del mismo autor en los que se fusionan además la cruz nuclear y el pan, fundiéndose la primera con el fondo del tapiz, y flotando el segundo, en primer plano.

En el exterior de los tapices se crean dos fondos, uno de color negro y otro de color blanco, que tiene mayor movimiento debido a las hojas verdes que se difuminan. En ambos fondos aparecen un total de 18 mariposas, todas de especies diferentes, varias de Canarias, que se relacionan directamente con las flores, un elemento fundamental en la confección de los tapices. El número de mariposas, 18, representa el número de alfombras realizadas por el equipo dirigido por Domingo González Expósito. Hay una de mayor tamaño. la mariposa monarca (Danaus plexippus), que se repite en los tres tapices junto a una flor, que representa al de este año, al que le corresponde el número 19.

En total, se utilizan 23 colores, haciendo especial hincapié en el rojo, el blanco y el negro; los dos últimos para diferenciar, fundamentalmente, la noche y el día."



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